Indubitadamente la altísima tasa de desempleo de este país se fundamenta no solo en factores financieros, sino también en factores estructurales, principalmente la baja formación laboral de muchísimos millones de españoles. Y es que la “Generación LOGSE”, está mayoritariamente integrada por “analfabetos funcionales” que para lo único que sirven es para colocar ladrillos. Y claro, en una coyuntura económica en la que la construcción se hunde, millones de “curritos” se van directos a la cola del INEM (ahora SPEE).
Frente a esta tendencia a la mano de obra poco cualificada, hay empresas que destacan por todo lo contrario: inversión en tecnología puntera, y reclutamiento de los mejores profesionales, de los mejor formado, de aquellos que aún tras haberse pasado años y años de duros esfuerzo sacándose la carrera, y haciendo cursos de especialización, aún creen que deben seguir aprendiendo, día a día.
Esta apuesta por el capital humano, es un clarísimo ejemplo de la “economía del conocimiento”, es decir, aquella en la que el verdadero valor no está en el ladrillo, sino en contar con una plantilla de profesionales altamente cualificados, dispuestos a prestar un servicio de élite en su ramo de actividad.
Un buen ejemplo de esta filosofía sería Corporación Dermoestética, que acaba de lanzar un portal de empleo destinado a reclutar a los mejores profesionales, para integrarse en una compañía que apuesta por el futuro, por la tecnología, la calidad y la excelencia en su campo de actividad (el sanitario en este caso).
Cualquier profesional puede encontrar en su web, una oportunidad de crecimiento, no solo profesional, sino también personal, ya que el trabajar en un entorno laboral como ese, hace que el crecimiento de la persona vaya mucho más allá del trabajo.
Sin duda, iniciativas como la lanzada por Corporación Demoestética, con su filosofía en búsqueda de la excelencia, no solo en la prestación de servicios, sino también en el reclutamiento de los profesionales mejor cualificados; son las que deberían marcarnos el “norte laboral” en este país.
Frente a esta tendencia a la mano de obra poco cualificada, hay empresas que destacan por todo lo contrario: inversión en tecnología puntera, y reclutamiento de los mejores profesionales, de los mejor formado, de aquellos que aún tras haberse pasado años y años de duros esfuerzo sacándose la carrera, y haciendo cursos de especialización, aún creen que deben seguir aprendiendo, día a día.
Esta apuesta por el capital humano, es un clarísimo ejemplo de la “economía del conocimiento”, es decir, aquella en la que el verdadero valor no está en el ladrillo, sino en contar con una plantilla de profesionales altamente cualificados, dispuestos a prestar un servicio de élite en su ramo de actividad.
Un buen ejemplo de esta filosofía sería Corporación Dermoestética, que acaba de lanzar un portal de empleo destinado a reclutar a los mejores profesionales, para integrarse en una compañía que apuesta por el futuro, por la tecnología, la calidad y la excelencia en su campo de actividad (el sanitario en este caso).
Cualquier profesional puede encontrar en su web, una oportunidad de crecimiento, no solo profesional, sino también personal, ya que el trabajar en un entorno laboral como ese, hace que el crecimiento de la persona vaya mucho más allá del trabajo.
Sin duda, iniciativas como la lanzada por Corporación Demoestética, con su filosofía en búsqueda de la excelencia, no solo en la prestación de servicios, sino también en el reclutamiento de los profesionales mejor cualificados; son las que deberían marcarnos el “norte laboral” en este país.
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