En tiempos de una crisis económica salvaje, con casi 4 millones y medio de parados (que en breve serán 5), y con un gobierno inepto más preocupado por hacerse fotos y seguir su permanente campaña de marketing, que por solucionar el caos económico que ha creado, millones de ciudadanos se ven en la necesidad de
apretarse el cinturón y reducir gastos en todas las partidas de su presupuesto familiar.
Los gastos superfluos y los derroches de otras épocas han pasado a mejor vida, y ahora hasta el último céntimo cuenta a la hora de cuadrar las cuentas familiares. Muchas personas han llegado incluso a
sacrificar el nivel de calidad de su alimentación, como bien demuestra el hecho de que los restaurantes de comida rápida estilo McDonalds hayan visto crecer exponencialmente sus beneficios. Y es que, como he mencionado, la economía ya no está como para pagar la cuenta de un restaurante standard.
En el ámbito familiar, esta reducción del gasto también se refleja en la
caída del consumo de las “marcas de prestigio”, y la deserción masiva de los consumidores hacia las “
marcas blancas”. Ejemplo de ello es que supermercados como Mercadona se han disparado en número de consumidores, y en el hecho de que las empresas de “marcas reconocidas” se hayan asociado para potenciar sus productos.
No obstante, los consumidores han preferido el “resultadismo económico”, y ello se debe a que en tiempos de crisis han visto que pagaban un precio excesivo por unos productos que no estaban verdaderamente diferenciados.
Ello también se pone de manifiesto en el caso de los
productos frescos, especialmente en frutas, carnes y hortalizas, puesto que los consumidores son conscientes de que las cadenas de distribución les cobran unos precios que multiplican exponencialmente la cantidad que se le paga al agricultor, resultando de esta peculiar ecuación que tanto consumidores como agricultores son los grandes perjudicados, mientras que
los intermediarios se enriquecen de una manera que es considerada injusta.
No obstante, la revolución de las nuevas tecnologías ha hecho que se empiecen a romper las “cadenas con los distribuidores” y que hayan surgido múltiples
"empresas que venden directamente al consumidor, desde el centro de producción, y sin intermediarios." Por ejemplo: un consumidor decide que quiere 5 kg de naranjas, hace su pedido al productor, y éste las recoge del árbol y se las envía directamente.
Como se puede imaginar, esto facilita que los productos entregados tengan un nivel de
calidad infinitamente mayor que si se compraran al por mayor, y se hiciera una distribución por grandes cantidades. Además, muchas empresas se han especializado en
productos ecológicos, de forma que el consumidor note la mayor calidad, el mejor sabor, y la conservación de todas las propiedades nutritivas del producto.
A continuación procedo a exponer algunos ejemplos de este tipo de empresas, para que cualquiera pueda acceder a productos de la máxima calidad,
sin tener que “pagarle el peaje a los distribuidores”, y sabiendo que el agricultor va a recibir un precio justo por su trabajo. Es decir, un ejemplo palmario de una “win – win relationship”.
En primer lugar, la guía por excelencia:
DIRECTO DEL CAMPO que recoge productores, provincias y categorías. Disponen de aceite, bebidas, carnes, pescados, lácteos, cestas, condimentos, conservas, panadería, quesos, jamones, frutas. También han incorporado cursos, catas, degustaciones y turismo rural y gastronómico.
Complementariamente, en
AGROBOCA encontrarán un índice generalizado de productores que se rigen por este modelo comercial.
Y pasando ya a webs específicas, podemos encontrarnos:
- AGRICULTURA VEDICA MAHARISHI, donde proponen una agricultura “en armonía con la ley natural. Un sistema de agricultura que nutre y apoya el agricultor, sus cultivos, y el medio ambiente”.
- PAÍS DE QUERCUS, con el ánimo de comercializar y divulgar los productos de la Dehesa Extremeña. Embutidos, curados, carnes, quesos y demás productos extremeños.
- TERRA MADRE, situados en Torremocha del Jarama. Tienen una hoja de pedido semanal en la que el usuario puede elegir los productos que desea: Frutas, verduras, vinos, pan, etc. Sus productos ecológicos están avalados por el Comité de Agricultura Ecológica de Madrid.
-LA DESPENSA DE JULIO: una empresa de venta de carne online (espedializados en criar
terneras y añojos de forma ecológica) y otros productos naturales.
- LA CESTA VERDE cuenta con todo tipo de artículos y distribuyen por todo Madrid.
Otras webs especializadas en la
distribución en la Comunidad de Madrid son:
•
DE LA HUERTA A TU PUERTA.
•
BLANCO.
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ECOCAJA.
Pero si hay un producto estrella en esto de la huerta en casa, ése es la
naranja, especialmente cuando se acerca la época de gripes y resfriados. Para tener acceso a los mejores cítricos del mercado, nos encontramos:
•
NARANJAS LOLA.
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NARANJA VALENCIANA.
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NARANJA MANÍA.
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SOY AGRICULTORA.
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LA MEJOR NARANJA.
Y para los que quieren disfrutar de una de las verduras más sanas durante todo el año:
TOMATES LOLA.
A las anteriores debemos añadirles, las siguientes webs, que muestran la gran distribución geográfica de este modelo de negocio:
- LA CESTA ORGÁNICA. Ofrece una selección, a granel o cestas, de los mejores productos ecológicos; también mucha información y consejos.
- FRUTA DIRECTA distribuye desde Fraga a toda España y Europa. La página fue creada por un grupo de jóvenes agricultores. Aseguran que toda la fruta ofrecida es madurada en el árbol.
- ECOHUERTO es otra opción, si bien el pedido mínimo es de 5 kilos.
- CAJA NATURE distribuye desde Murcia verdura y fruta ecológica a toda la península. Se trata de una asociación de productores, la mayoría murcianos. Disponen de cajas seleccionadas de verdura, fruta, productos sueltos, etc.
- En
AGROROSA, Tenerife, se esfuerzan por ofrecer un producto de calidad que vaya directamente del huerto ecológico a su casa.
- TUDELA FRUITS es otra opción adecuada para encontrar productos de cultivo local. También tienen quesos, aceites, frutos secos, etc.
- RECAPTE Situados en la huerta de Lérida, preparan semanalmente una cesta con frutas y verduras cultivadas de forma que lleguen al consumidor libres de cualquier contaminación. Mitad frutas y mitad hortalizas, y unos diez productos diferentes en cada cesta.
- En
DELATERRA en cambio, únicamente distribuyen en Cataluña. Todos los productos provienen de su huerto, en el Parque Natural del Montseny. Además, unos 700 productos de agricultura biológica certificada o de comercio justo: Hortalizas, frutas, lácticos, bebidas, carnes, pasta, jabón, detergente, aceite, galletas, etc.
Sin duda, tras ver esta amplia oferta para “hacer la compra sin pagar intermediarios”, muchos ciudadanos podrán seguir disfrutando de productos de alta calidad, a buen precio, y sin que la crisis económica les arrastre más.