Recientemente nos hemos encontrado la nueva campaña de las juventudes socialistas, y sinceramente me ha parecido burda y simplona, aunque en el fondo refleja el “espíritu de Pepiño Blanco”.
Si tradicionalmente era fácil encontrarse al típico progre caracterizado, entre otras cosas, por:
- Soltar interminables discursos sobre “la lucha obrera”, “el proletariado” y demás paparruchas izquierdosas, aunque en el fondo no tuviera ni la más remota idea de lo que estuviera hablando, y sin darse cuenta que el siglo XIX ya hace tiempo que caducó.
- Llamar “fascista e intolerante” a todo aquel que no coincidiera con sus postulados ideológicos de izquierda.
- Ver el fantasma de Franco hasta en la sopa (por cierto pequeñines, hoy es 18 de julio… cuidado con las pesadillas).
- Defender contra todo atisbo de razón, “causas perdidas”, como en su día fueron “la honradez de los gobiernos de Felipe González”, llegando a aceptar en el mejor de los casos una tenue “se han cometido errores pero…”
Hoy en día nos encontramos a los “new reds”, jóvenes izquierdistas fruto de esa “gran ley educativa que fue
Bien, fruto de esa ley generadora de “acémilas culturales”, tenemos a los “new reds”, que se caracterizan por servir de “fuerzas de choque” para la batalla electoral. Así podemos ver cómo en un ejemplo de respeto a las normas democráticas, surgidos por ciencia infusa, en la jornada de reflexión electoral anterior al 14M, grupos de jóvenes izquierdistas de forma espontánea decidieron asediar las sedes del principal rival del PSOE en las elecciones a celebrar el día siguiente. ¿Casualidad u orquestación?
Siguiendo esta línea de actuación, han tenido la “inteligencia” de mostrarse como jugadores de rugby… es decir, masas de músculos descerebradas teleológicamente orientadas a frenar al rival. Si es que se han autodefinido perfectamente.
Ahora bien, ¿qué propuestas han hecho? ¿cuál es su programa de futuro? ¿no sería más normal que unas “juventudes” mostrasen la visión que éllos tienen sobre un futuro que pueden tener que acabar gestionando en años venideros? Pues lo que parece es que solamente están interesados en actuar como “guardia de corps social de Pepiño Blanco”, que aunque al pertenecer a otra generación, no pueda calificarse de “new red”, en el fondo personifica exactamente la filosofía de los mismos:
- Escasa formación (eterno estudiante de Derecho que fue incapaz de aprobar el primer curso).
- Total falta de escrúpulos.
- Disposición a hacer lo que sea para anular al adversario político (el verbo “anular” es un eufemismo).
Si el “PSOE del futuro” viene representada por este tipo de gente… seguro que en pocos años tendremos que santificar el principio de que “cualquier tiempo pasado fue mejor”… ¡Quién me iba a decir a mí que hasta Felipe González me iba a acabar pareciendo ”” bueno”””, comparativamente hablando!
Y con este post me despido hasta septiembre (salvo fuerza mayor), ya que sinceramente, lo único que está en mi mente estos días, son las cristalinas aguas del océano Índico que en agosto visitaré. Por tanto, las réplicas y contrarréplicas se harán esperar.
P.D: si alguien hace algún comentario, por favor, que suelte algo mejor que el tradicional “mezclar churras con merinas”, porque hacer análisis lineales, acaba siendo aburrido y poco interesante. Por ello prefiero los transversales, aunque a algunos se le resistan.