10 de abril de 2008

"Gazprom: el Arma Energética de Rusia para Controlar Europa"


A continuación un interesante artículo de Robert R. Ámsterdam sobre la “utilización de Rusia del arma energética, Gazprom, en sus relaciones con Europa”:



“En Europa se ha secuestrado el término “seguridad energética” para dar poder a los proveedores y debilitar a los importadores, lo que entraña una drástica reducción de la competencia, una mayor vulnerabilidad política y la erosión del Estado de Derecho. El hecho de que Dimitry Medvedev, sucesor del Presidente Vladimir Putin, haya sido el Presidente de Gazprom despeja todas las dudas sobre la determinación del Kremlin de mantener sujeto con puño de hierro el sector de la energía, pero hay que poner fin a la asimetría en las relaciones Unión Europea-Rusia en materia de energía.



Nunca habían sido mayores en la UE las preocupaciones por la seguridad energética, alimentadas por la dependencia cada vez mayor de Rusia. La expropiación de la compañía petrolera Yukos por parte de las autoridades rusas ha ido acompañada de la expulsión de los extranjeros del sector de la extracción de energía. Inevitablemente, muchos en Europa ponen en entredicho el valor de la palabra del Kremlin.



En lugar de apartarse, la UE debe intentar conseguir un compromiso y una reciprocidad mayores. Debe facilitar una mayor participación de Gazprom en el mercado de la UE mediante la liberalización del mercado y la integración de las fases finales de la producción, pero también debe presionar en última instancia en pro de la reestructuración de Gazprom y la entrada real en el mercado ruso de las compañías europeas, porque la renuencia de Rusia al respecto garantiza la inseguridad energética para Europa.



De hecho, el gobierno de Putin contó con un historial de flexibilidad en la aplicación de las normas e intimidación a los inversores extranjeros, con el apoyo de fiscales, organismos tributarios, organismos reguladores y tribunales. Al mismo tiempo, Gazprom ha llegado a ser la creadora predominante de mercados del gas en Europa y su actuación ha sido una burla de las medidas adoptadas por la UE para lograr una mayor colaboración con Rusia.



La estrategia de Gazprom se compone de tres tácticas:



- La cooptación, es decir, cultivar asociaciones con ciertos países, dirigentes políticos y grandes empresas como palancas en pro de sus intereses.



- Actitudes preventivas: utilizar el poder en las primeras fases de la producción.



- La diplomacia rusa para manipular las condiciones correspondientes a las últimas fases de la producción y apoderarse de activos a manos llenas; y la desmembración: dividir a la UE mediante acuerdos bilaterales.



Gazprom ha logrado la cooptación de Europa principalmente por mediación de Alemania, donde sus asociaciones con compañías de energía y bancos han contribuido a alinear a las autoridades en pro de los fines rusos. Está en marcha una extensa operación de cabildeo, directo o por poderes, a fin de persuadir a los reguladores europeos para que permitan los contratos de suministro a largo plazo en la UE… pese a sus negativas consecuencias para la competencia.



La labor de prevención por parte de Gazprom ha consistido en una multitud de adquisiciones. Gazprom ha inundado el mercado en Turquía, ha privado de gas a Ucrania, ha amenazado con hacer lo mismo en Bielorusia y ha ofrecido un acceso preferente al mercado a los socios dispuestos a ayudarla, como, por ejemplo, Italia.



En el Cáucaso, el Kremlin ha impedido al Irán crear la infraestructura necesaria para competir como proveedor de gas a Europa. Para detener la llegada del gas del Irán, Rusia compró prácticamente todo el sector energético de Armenia, mientras que su apoyo al programa nuclear del Irán contribuye a mantener el aislamiento del Irán y a alejar los fondos occidentales que este país necesitaría para llegar a ser un exportador de gas rival.



El predominio de Gazprom resulta reforzado por actividades coordinadas con el Kremlin para imponer su influencia en mercados como España e Italia. A cambio de acuerdos sobre el gas con proveedores rivales, como, por ejemplo, Argelia, Rusia ha ofrecido importantes concesiones en materia de armamento y condiciones preferentes en materia de deuda.



En otros casos, el Kremlin adopta actitudes punitivas, como cuando cortó el suministro de petróleo a Lituania, a raíz de la venta de la refinería de petróleo de Mazeikiu a una compañía polaca, o a Ucrania después de que sus ciudadanos votaran a favor del partido “que no debían”.



El primer ejemplo de desmembración es el gasoducto de Nord Stream, que gusta a Alemania, pero irrita a Polonia y a los países bálticos. El gasoducto submarino costará tres veces más que uno nuevo por las rutas terrestres existentes, socava la seguridad energética de los vecinos orientales de Alemania y amenaza el frágil ecosistema del mar Báltico, pero, al entregar las exportaciones directamente a Alemania, Rusia podrá cortar el suministro de gas a Ucrania, Polonia y los Estados bálticos sin afectar directamente a los suministros con destino a la Europa occidental… y el reciente comportamiento de Rusia indica que se trata de una amenaza real.



Pero en Gazprom existe preocupación por sus capacidades en las primeras fases de la producción, como lo demuestra la decisión de desviar el gas de su yacimiento de Shtokman a Europa en lugar de licuarlo para nuevos mercados de Norteamérica. Mientras Gazprom mantenga una actitud opaca, Europa no podrá saber si su principal proveedor está invirtiendo lo suficiente para desarrollar reservas futuras. La batalla política del Kremlin para conseguir el control del sector energético de Rusia ha provocado una reducción espectacular de la tasa de crecimiento de su producción de petróleo y gas.



Se trata de un problema para Europa. Grazpom no puede ser un socio para Europa, si no invierte en su infraestructura y, sin embargo, desempeña un papel predominante en la destrucción de empresas privadas rusas, invierte 14.000 millones de dólares en activos no básicos, como, por ejemplo, medios de comunicación y está dirigida desde la Oficina de Administración Presidencial.



No se deben apagar las luces en toda Europa. Bruselas debe exigir a Moscú transparencia, simetría e imperio de la ley con el fin de lograr una revolucionaria integración de los mercados energéticos europeo y ruso.



Simultáneamente, mediante la diversificación de las fuentes de suministro, inversiones en gran escala en el gas natural licuado y una actitud enérgica en pro del gaseoducto Nabucco y las interconexiones entre los países ribereños del Mediterráneo, Europa puede avanzar hacia la seguridad energética.



El propio acceso a las fases finales de la producción que desea Grazprom en Europa es la mejor baza de la UE. Ésta debe decir a Gazprom que el acceso a los activos de las fases finales de la producción de Europa estará sometido a la condición de una apertura recíproca al sector energético de Rusia. El resultado sería una grata participación en el mercado energético europeo para una Rusia en la que confiarían –además de respetarla– sus socios internacionales.”

13 comentarios:

Anónimo dijo...

A este respecto no sé si conoces los negocios del anterior canciller alemán, el inefable Schröder, con Putin y Gazprom, valga la redundancia.

Una vez retirado de la política tras perder (y por los pelos, de donde se demuestra que la estupidez humana es algo universal) las elecciones de 2005, empezó a trabajar para Gazprom. Lo curioso es que apenas unas semanas antes del cambio de gobierno había dado autorización para la construcción del famoso gaseoducto del Báltico que une Rusia y Alemania directamente.

En todos los sitios cuecen habas...

Butzer dijo...

Tocando el tema de casa... la independencia energética que tenemos en España es tremenda... Yo quiero que de una vez por todas se debata la alternativa de las nucleares. Pero que se debata de verdad.

Anónimo dijo...

Nada nuevo bajo el sol. Un nuevo episodio más de las relaciones entre los países que ofertan energía y los que sólo la consumen, en donde los primeros tienen cogidos por los huevos a los segundos.

Yo también quiero que se debata en serio la alternativa de las nucleares poniendo sobre la mesa su verdadera eficacia energética, riesgos y costos ecológicos. Y que no se quede todo en una mera presión sobre la opinión pública para que los gobiernos las subvencionen, que en mi opinión es lo que en realidad ciertos intereses empresariales buscan al abrir el debate.

Andrés Álvarez dijo...

Es que es indudable que Grazprom tiene el favor del Kremlin. La democracia oligárquica rusa es un pulpo que amenaza con engullir el mercado energético. Tenemos a los problemas con Ucrania y Bielorrusia, los proyectos de oleogaseoductos por el Báltico y Anatolia, las posibles perforaciones petrolíferas en el Ártico...

Personalmente creo que el Continente lo tiene difícil en el tema enérgético. Dependencia altísima respecto al petróleo, gas y carbón y relativamente pocos oferentes (India, Argelia, Rusia..).
Estoy de acuerdo con Butzer, hay que replantearse el tema de la moratoria nuclear. Creo que lo mejor es potenciar la energía nuclear como fuente energética principal y desarrollar otras energías auxiliares como la solar, la geotérmica o la de biomasa. También soy favorable a la investigación de biocombustibles.

En general creo que el tema energético está poco liberalizado. Mira las nacionalizaciones de empresas en Hispanoamérica o la OPEP, que en el fondo solo actúan de manera arbitraria.

Saludos.

Anónimo dijo...

una persona sin información sé convierte en una persona sin opinión´ es lo que me ocurre en
esta ocasión.
He leido en otros sitios que se está trabajando sobre el hidrógeno
y un avión ha logrado subir a mil metros de altura.
Lo que si recuerdo es que la difunta q.e.p.d Doña Loyola de
Palacios, ya se inclinaba por las
energias nucleares
Es necesario buscar otras fuentes´
y no estar embargados con las actuales,pues nos terminarán
ahogando´

Un saludo

Rasputín

Anónimo dijo...

Rasputín.
El hidrógeno también propulsa el transbordador espacial y lo eleva a órbita, o sea, bastante más de 1000 metros de altitud.
Es un potente combustible, si bien, tiene enormes inconvenientes en su manejo. Desgraciadamente no es una fuente de energía, no mana por ninguna parte, hay que sintetizarlo invirtiendo una cantidad de energía bastante mayor que la que se obtiene quemándolo.
En cuanto a Loyola de Palacio, que en paz descanse, era titulada en Derecho, por tanto su opinión al respecto no estaba cualificada, a falta de otras informaciones.

Andrés. Para obtener el biocombustible equivalente a un barril de crudo hace falta explotar una burrada de hectáreas. Terreno que se deja de emplear en cultivar alimentos. Su rentabilidad energética es bajísima, y en muchos casos incluso negativa. Estamos, por tanto, ante un fraude al erario público, vía subvenciones.

Adamantio dijo...

Sí, conocía el "nuevo empleo del excanciller". Si es que hay formas y formas de comprar voluntades...

¿Independencia energética de España? jejeje tenemos la mayor dependencia exterior de Europa, y seguimos pensando que con sonrisas se resuelve todo.

Debate nuclear: hay que exponer con claridad a la opinión pública la nueva situación, y hacer ver que las centrales de tercera generación son infinitamente más seguras que las de los años 70. Por otra parte, más que al coste económico, se le van a dar importancia a motivos como la independencia energética y al aseguramiento del suministro. Con la subida del petroleo, y la inestabilidad de ciertos países, puede salir más rentable pagar más por tener un suministro asegurado.

Por cierto, es España hay uranio que dejó de explotarse por motivos políticos. ¿Reabrimos las minas? Tema a debatir...

Anónimo dijo...

Lole : gracias por la lección,
es que me encanta meterme en charcos, y más aún cuando lo hago
entre personas educadas ,pue sé
que no seré flagelado
Un saludo para todos/as y para el dueño y señor del Blog

Rasputín

Anónimo dijo...

Adamantio.
Según este enlace
http://www.foronuclear.org/222/222cp9.htm
España consume anualmente unas 1.500 toneladas.
Las reservas nacionales de uranio no llegan a 20.000 toneladas. O sea que nos podríamos autobastacer poco más de 10 años.
Si tenemos además en cuenta que las cacareadas plantas de tercera generación requieren entre 5 y 10 años (o más según la experiencia finlandesa) para su construcción, tiempo que no sólo se gasta dinero, además se gasta energía (y mucha), si tenemos en cuenta que las reservas mundiales son tan deprimentes como las de crudo, y si tenemos en cuenta los costes de desmontar una central nuclear (porque eso habrá que hacer cuando agotemos el material fisible del planeta), pues francamente no acabo de ver claro que valga la pena meternos en esa aventura, por muy óptimas que sean las condiciones de seguridad.

Hay que buscar otro plan B, que sirva a más largo plazo, que no nos haga merecedores de los odios de nuestros nietos.

Adamantio dijo...

Quizá este lo interese:
"España, a la cola en uso de uranio, con sólo 8 reactores instalados y una pobre presencia en el mix energético.

Algo parece estar cambiando en la sociedad acerca de la instalación de centrales nucleares. Poco a poco, el uranio gana adeptos como complemento a la generación eléctrica, que sirva para cubrir las necesidades de un mundo cada vez más globalizado. Actualmente, apenas el 17% de la electricidad del planeta proviene de la energía nuclear, a pesar de la implantación que ha tenido en EEUU y Europa en las dos últimas décadas.

La energía nuclear tiene a su favor que no produce emisiones GEIs, relacionadas con los gases de efecto invernadero, por lo que reduce la contaminación a la atmósfera y sirve para combatir el cambio climático. Además, su materia prima, el uranio, tiene reservas bien repartidas por todo el mundo. Es decir, que sería imposible pensar en un lobby semejante al que ejerce la OPEP, la Organización de Países Exportadores de Petróleo, con el precio del crudo.

En Europa, Francia apostó hace tres décadas por la energía nuclear, y, hoy, el 80% de la electricidad que produce proviene del uranio. "El modelo francés es algo exagerado, aunque les permite exportar energía y ha convertido a Francia en un gran productor eléctrico", afirma Eduardo Gómez, presidente del Foro de la Industria Nuclear Española. Según el informe Energía Nuclear, energías renovables y tecnológicas limpias, publicado por la patronal empresarial CEOE, España necesita instalar diez nuevos reactores nucleares que produzcan los 17 gigawatios de potencia suplementaria necesarios en 2030. Es más, según este documento, de no abordar a corto plazo un "debate serio y documentado" sobre la implantación de esta energía, "afrontaremos consecuencias graves".

Las cifras son concluyentes. Mientras en la UE el 32% de la electricidad proviene del uranio, en España ni siquiera llega al 20%, con apenas ocho reactores operativos. Precisamente, una de las centrales en funcionamiento, Garoña, la más veterana, será revisada en 2009 para analizar su posible cierre. Algo que preocupa a los expertos del sector. Desde UNESA, la patronal eléctrica, aunque aseguran que, por el momento, el mix energético actual cubre la demanda de la población española, apuntan que "no hay sustituto para la energía nuclear" y que su uso "será necesario para el futuro". Por su parte, en ENUSA, la Empresa Nacional del Uranio, son aún más concluyentes, y aseguran que su uso es "vital" para asegurar el abastecimiento en los próximos años.

Las cifras sobre producción energética nuclear de España en comparación con el resto de Europa resultan sonrojantes. La industria nacional está a la cola de la UE, con sólo 8 reactores operativos y un 17% de la electricidad producida por centrales de este tipo. Por poner un ejemplo, Alemania, país tradicionalmente en contra de su implantación, soporta el 26%, gracias a los 17 reactores que tiene instalados en su territorio.

Aún así, hay motivos para la esperanza. España cuenta con representantes en la mayoría de los foros nucleares internacionales que existen en la actualidad, como la WNA (World Energy Agency), o la WANO (World Association of Nuclear Operators). Sin embargo, desde el Foro Nuclear recalcan que el Gobierno "jamás" ha potenciado la presencia española en estos organismo, y que siempre ha partido "de voluntades y esfuerzos individuales".

Un nuevo comienzo
Por el momento, voces antes radicalmente en contra del uranio, están mostrando un cambio de parecer, como José María Fidalgo, secretario general de CCOO, o Joaquín Almunia, comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se declaró hace unos días partidario de un debate nuclear, mientras que su partido, el PSOE, ha mantenido tradicionalmente una corriente activa proclive al uranio, liderada por el Presidente de la Generalitat, José Montilla, y Jesús Caldera.

El consenso entre los analistas apunta a la necesidad de aumentar en 20.000 megawatios la producción de energía nuclear, y en mejorar su presencia en el mix energético español al 40%, en detrimento de otras energías como la hidroeléctrica o la que producen las centrales de ciclo combinado, que usan gas natural, y cuyos modelos parecen agotados.

Los pros de la energía nuclear
· Una central eléctrica nuclear de 1.000 MW de potencia precisa entre 1 y 4km2 de extensión; una eólica más de 50 km2, y una de biomasa alrededor de 4.000 km2.

· La volatilidad en los costes del uranio afecta sólo un 10% al coste final de la producción de energía.

· La energía nuclear únicamente se utiliza para la producción eléctrica.

· No produce emisiones GEIs, por lo que se vierte menor contaminación a la atmósfera.

· Las reservas de uranio se encuentran muy repartidas por todas las regiones del mundo.

· Apenas ha habido accidentes mortales en la Unión Europea relacionados con la energía nuclear en los últimos 20 años. "

Anónimo dijo...

¿Qué me está diciendo con esa réplica? ¿Que como otros países de la UE se están replanteando el tema, España debería hacer igual?

Casi todo lo que ha expuesto es cierto. Pero eso no invalida otras evidencias.
-Que para construir una central como la de Finlandia, o sea de lo más moderno, se requieren cerca de 10 años. Eso no sólo es una inversión enorme de tiempo, sino también de dinero y energía (mayoritariamente de combustibles fósiles). Oiga, la finlandesa de Olkiluoto ya lleva un sobrecoste de 1.500 millones de euros para desgracia de la empresa francesa Areva.

-Que una central nuclear tiene una vida activa de 25 a 35 años. A partir de esa edad, el riesgo de accidentes crece exponencialmente.

-Que las reservas fisibles, si bien no están mayoritariamente ubicadas en países gobernados por bastardos (como ocurre con el petróleo), son sustancialmente escasas. Si media OCDE intenta imitar el modelo energético francés verá lo rápido que nos pulimos dichas reservas.

-Que los costes de desmantelamiento de una central nuclear son disparatadamente altos. Sin olvidar lo tentador que puede ser ahorrar pelas, escondiendo sus restos debajo de la alfombra (eufemismo que representa al Tercer Mundo).

Desgraciadamente las reservas de crudo ya no son lo que eran, parece que estamos llegando (o ya hemos llegado) al temido Oil Peak, con todo lo que conlleva. Por eso es una apuesta arriesgada invertir una fracción significativa de las reservas energéticas basadas en combustibles fósiles construyendo nucleares, para pocas décadas después tener que desmantelarlas.

Al principio dije que casi todo lo que ha expuesto en su último post es cierto. Ahora me centro en ese casi: lo de la contaminación. El proceso estricto de generar energía mediante la fisión de átomos efectivamente no genera GEIs. Desgraciadamente no podemos decir lo mismo de la extracción de uranio, la construcción de centrales, el enriquecimiento del material fisible, el reprocesamiento de sus residuos, su transporte, su almacenamiento y el desmantelamiento de las centrales. La energía nuclear indirectamente sí genera GEIs, como es normal en cualquier actividad humana a escala industrial.

Entonces, si la energía nuclear no es la respuesta que necesitamos, ¿por qué tanto jaleo, por qué tanto llamamiento a reabrir el debate?
Probablemente porque empezamos a estar desesperados, y porque el lobby nuclear está siendo muy activo, en España y en el resto de la OCDE. En España no se construyen nucleares por decisión gubernamental, pero en otros países (como USA) no existe esa prohibición, y sin embargo, tampoco las construyen. Sí, ya sé que el coste creciente del crudo en parte hace o hará tentadora la energía nuclear. Pero aún así sigue siendo una aventura empresarial poco viable. Demasiada inversión, demasiada demora para recuperar lo invertido, demasiadas incertidumbres. El capital privado no parece dispuesto a mojarse así sin más.
De ahí las presiones del lobby en todas partes: buscan subvenciones, buscan inversiones estatales.
Usted no sé, pero yo no estoy dispuesto a seguirles en el cuento. Sí quieren pelas, que lo digan directamente.

Lo preocupante es esa previsión de crecimiento del consumo de energía de 17 GW en España de aquí hasta el 2030. Genial, la producción de crudo ya casi (o quizás sin casi) no cubre la demanda, pero aquí seguimos incrementando el consumo energético como si no pasara nada. Así hasta que nos demos cuenta de que ya no sólo escasea el crudo, sino también el uranio.
Cuanto más tardemos en tomar conciencia de que este planeta y sus recursos son finitos, mayor será el disgusto.
Usted seguro que ve las cosas desde un punto de vista economicista. Es decir, que para que la economía crezca es imprescindible que también crezca el consumo de energía y por consiguiente, su producción. Como no se conocen modelos económicos que no se basen en el crecimiento, pues hay que seguir en esta dirección, creciendo. Es fácil confiar en que siempre encontraremos una alternativa cuando se nos acabe un recurso. Es fácil confiar en que el Mercado encontrará con sus propias inercias una solución. Cierto que el mercado incita a concentrar esfuerzos para encontrar alternativas.
Pero por mucho dinero que se invierta en investigación, donde no hay, no hay.

Desgraciadamente, las leyes de la Termodinámica se pasan por el forro las del Mercado.

Saludos

Adamantio dijo...

Lole, básicamente estamos de acuerdo en la necesidad de encontrar una fuente de energía segura y no contaminante mediante I+D+I, y ese proyecto de la "energía nuclear limpia" que está en fase de estudio puede ser la clave.
Ahora bien, hasta que se consiga, el monstruo energético debe ser alimentado, y si el petróleo escasea o está en manos de poca confianza, le guste o no hay que buscar una alternativa a corto plazo, ya que de lo contrario nos econtraríamos en un escenario de falta de energía (por escasez, o por imposibilidad de pagar su alto precio), y ello nos llevaría al desastre social y económico.

Anónimo dijo...

A corto plazo la fisión nuclear no es una alternativa, como ya le he explicado. Por contra, es una forma fácil de pulirnos una buena parte de nuestras reservas de crudo en el proceso de conversión. Y todo para un puñado de décadas.
No vale la pena el esfuerzo en dinero y energía. No nos lo podemos permitir.

En cuanto a la "energía nuclear limpia", supongo que se refiere a los reactores de fusión. De eso ya hemos hablado sobradamente: encierra una gran incertidumbre. Ya se puede invertir la mitad del P.I.B. mundial, que no hay garantías de éxito. Esto es ciencia, no economía. No se puede afirmar que a mayor inversión, mayor garantía de descubrir algo (por supuesto, si no se invierte, no se descubre nada, lógicamente). Puede que se descubra cómo obtener energía barata, o puede que matemáticamente se demuestre que es imposible.
No niego que haya que seguir investigando en esa dirección. Pero no podemos depositar el futuro de nuestros nietos en algo así, en algo que podría ser un callejón sin salida.
Hay que buscar alternativas a largo plazo y que sepamos ya que pueden funcionar.

Ideas Libérrimas - 2008 -